Mitos sobre el suicidio

24 enero 2018

Gema Gutiérrez – Psicóloga @ Hallin Mental Care

Existen diferentes mitos y creencias sobre el suicidio que en ocasiones no nos cuestionamos, ¿Qué hay de cierto en todo ello?

Existen diferentes mitos y creencias sobre el suicidio que no cuestionamos y, sin querer, contribuimos a que se siga manteniendo en el tiempo.

Nos parece extremadamente importante el conocerlos, y sobretodo, saber cuánto de cierto hay en ello para que se pueda contribuir a su prevención.

En este articulo se recogen muchos de dichos mitos y creencias y tratamos de aclararlos, dada la gravedad del tema en sí.

Las creencias /mitos más comunes sobre el suicidio son:

LA PERSONA QUE AVISA SOBRE SUS INTENCIONES SUICIDAS, NUNCA LO LLEVA A CABO.

La realidad es que 9 de cada 10 personas con ideación suicida, advierten a los que le rodean de sus intenciones de una forma u otra.

EL SUICIDIO NO SE PUEDE PREVENIR.

Siempre se dan pistas sobre lo que se planea hacer mediante diferentes señales como: presentar un llanto inconsolable, mayor tendencia al aislamiento, la expresión directa o indirecta de amenazas suicidas y/o deseos de morir, sentimientos de desesperanza, súbitos cambios de conducta, afectos y hábitos, conductas inusuales, consumo excesivo de alcohol o drogas, realizar notas de despedidas, etc

LA INTENCION SUICIDA SIEMPRE PERMANECE EN LA PERSONA.

Los pensamientos suicidas desaparecen siempre que la persona reciba tratamiento profesional adecuado, lo que no se puede garantizar es que no puedan presentarse de nuevo en un futuro.

TRAS REMITIR LA CRISIS SUICIDA, NO HAY RIESGO DE QUE SE PRODUZCA UN SUICIDIO.

La mayoría de los suicidios tienen lugar entre los tres meses posteriores a la crisis suicida, pues las personas con ideación suicida presentan mejoría mas rápidamente a nivel motor que ideático, por lo tanto aumentan su energía y capacidad física para actuar acorde a sus pensamientos.

EL SUICIDIO ES GENETICO.

Aunque existe una correlación entre el componente genético y el suicidio, no está demostrado que sea un factor hereditario. Obviamente deben darse la combinación de ciertos factores, de índole personal y ambiental, para que tenga lugar.

EL SUICIDA ES UN ENFERMO MENTAL

El suicidio es claramente un síntoma de la depresión y también lo es para otras enfermedades mentales como la esquizofrenia, el alcoholismos o el cáncer, pero no está determinado el diagnostico en todos los casos. Lo que sí está claro es que la persona que lo piensa o lo comete con o sin éxito se encuentra bajo muchísimo sufrimiento.

EL SUICIDA SOLO QUIERE LLAMAR LA ATENCION

No deberíamos tener en cuenta este hecho, pues si lo es o no, las consecuencias de que se produzca pueden llegar a ser letales y sin posibilidad de vuelta atrás.

SOLO SE SUICIDAN LAS PERSONAS RICAS

No existe correlación entre el suicidio y el estatus social. La persona que trata de suicidarse carece de habilidades para lidiar con la situación en la que se encuentra y en muchas ocasiones, el elevado poder adquisitivo no es la clave para la solución del problema. Si es verdad que el suicidio es más frecuente en países desarrollados que en los subdesarrollados.

EL SUICIDA ES ALGUIEN MUY COBARDE O MUY VALIENTE.

Tanto un concepto como el otro no se mide por el número de veces que alguien se intenta suicidar. De nuevo especificamos que la persona con ideación suicida no dispone de recursos para continuar con su vida y considera el suicidio como la mejor opción.

SI SE RETA UN SUICIDA, NUNCA LO LLEVA A CABO.

Esto es una gran equivocación, pues nunca se llega a conocer la vulnerabilidad, fuerza o capacidad de respuesta del suicida ante el reto de cometer el suicidio. Alentar al suicida supone confirmar sus creencias erróneas de no tener alternativa en la vida.

LOS NIÑOS Y/O ADOLESCENTES NO SE SUICIDAN.

Desde que se concibe el concepto de muerte existe la posibilidad de que tanto niños como adolescente lleven a cabo el suicidio, y de ahí que se produzcan en este sector de la sociedad.

EL SUICIDA SOLO SABE QUE SE QUIERE MORIR.

El suicida se debate entre la vida y la muerte y se encuentra indeciso. Sabe que con la muerte acabara con el sufrimiento pero a la vez quiere alivio para su situación y tener mejor vida. Algo evidentemente incompatible.

Mediante estas anotaciones esperamos haber podido aclarar falsos concepciones sobre el suicidio que perjudican, de una u otra forma, a aquel que sufre notablemente y lo ve como única salida a su situación.

Si usted tiene ideación suicida o conoce a alguien que la tenga, por favor, contacte lo antes posible con un personal cualificado, psiquiatra o psicólogo, que pueda proporcionar un adecuado tratamiento dada la gravedad de la sintomatología.

Mitos sobre el suicidio

Gema Gutiérrez – Psicóloga