Trastorno del Pánico

Tratamiento del Pánico

Los ataques de pánico con el tratamiento adecuado tienden a remitir, por lo que la persona vuelve a desarrollar su vida normal.

Se caracterizan por ser breves, de intenso miedo y terror. Después de sufrir una crisis las personas temen que se repitan o que cause consecuencias trágicas como perder el control, sufrir un infarto o volverse loco. Cuando una persona lo tiene, siente elevados niveles de angustia y ansiedad con intensos pensamientos aterradores de que algo grave puede ocurrir.

Además, no se pueden predecir, ya que no hay ningún desencadenante que lo comience. Y el recuerdo de un episodio pasado puede provocar otro.

Son más comunes en mujeres que en hombres. Y lo padecerá de un 1 al 3 % de la población. La edad de inicio suele abarcar desde el final de la adolescencia o hasta principios de la edad adulta.

Suelen ser frecuentes en pacientes con trastornos de ansiedad, trastornos del estado de ánimo y trastornos relacionados con el consumo de sustancias.

Tratamiento de ansiedad y ataques de Pánico en Marbella, Gibraltar, Sotogrande, Fuengirola

Pronóstico

Los estudios longitudinales, nos indican que su evolución sin tratamiento es crónica e incapacitante.

Por el contrario con el tratamiento adecuado la gran mayoría de los pacientes mejoran considerablemente. Ya que este ayuda a reducir la intensidad y frecuencia de los ataques de pánico.

Un tratamiento eficaz exige detección precoz, psicoterapia (desde un enfoque cognitivo conductual) y farmacoterapia.

Causas

No se conoce la causa exacta de por qué se desarrolla. Aunque si, se sabe de factores que influyen como son:

Una de los principales factores es el consumo de drogas como la cocaína, el cannabis y el alcohol.
Un alto nivel de estrés como puede ser una muerte, la grave enfermedad de un familiar, un divorcio o la incorporación de un bebe a la familia.
La genética, como que otro miembro de la familia sufra ataques de pánico.
Antecedentes de maltrato físico o abuso sexual en la niñez.

Síntomas

Habitualmente aparece de manera repentina un miedo o malestar intenso que alcanza su expresión máxima en cuestión de minutos y durante este tiempo se producen cuatro o más de los siguientes síntomas:

Palpitaciones, golpeteo del corazón o aceleración de la frecuencia cardíaca.
Sudoración.
Temblor o sacudidas.
Sensación de dificultad para respirar o de asfixia.
Sensación de ahogo.
Dolor o molestias en el tórax.
Náuseas o malestar abdominal.
Sensación de mareo, inestabilidad, aturdimiento o desmayo.
Escalofríos o sensación de calor.
Parestesias (sensación de entumecimiento o de hormigueos).
Desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (separarse de uno mismo).
Miedo a perder el control o de “volverse loco”.
Miedo a morir
Afecta a las diferentes áreas de la vida de la persona que los padece como el área familiar, social y /o laboral.

Tratamiento

El tratamiento más adecuado para este trastorno es la combinación de la psicoterapia y los fármacos.

Psicoterapia. La terapia cognitivo-conductual es muy eficaz para tratarlos. La persona aprende distintas formas de pensar, comportarse y reaccionar ante diferentes situaciones para que se sienta menos ansioso o preocupado. Empezando a desaparecer cuando la persona actúa de diferente manera ante las sensaciones físicas de ansiedad y el miedo que produce.

Fármacos. Los fármacos que más se utilizan para el tratamiento son:

Antidepresivos de los que existe un grupo, que funcionan muy bien para los trastornos de pánico.
Benzodiacepinas son muy eficaces para disminuir rápidamente los síntomas del ataque de pánico.